domingo, 10 de octubre de 2010

LA VIDA EN MAS COLORES

Como ya todos se habrán dado cuenta -o lo sabrán por experiencia propia-, esto de tener dos no deja mucho tiempo libre. Por eso no habíamos podido volver a publicar. Así que en esta "emisión", les vamos a dar un resumen rápido de estos primeros casi seis meses con Tomás en la familia. Ahora, además del Violeta, nuestra vida tiene muchos más colores...




Como es natural, para la Viole fue un poco difícil la llegada de su hermano. Aunque eso sí, ella tuvo superclaro hacia quien dirigir su enojo, no sobre su hermano, sino sobre sus papás, quienes al fin y al cabo, fueron los responsables de traer al "otro". A Tomás lo ama profundamente, lo cuida y juega con él. Y él adora a su hermana, es cosa de verla para que se le iluminen sus ojitos y se vuelva todo sonrisas.

Los pocos retrocesos de Violeta estuvieron en la dormida, le costó volverse a dormir sola y rápidamente, además de descubrir que podía abrir la puerta de su cuarto y salirse si no quería acostarse. Por suerte, ya se le pasó y volvió a su rutina habitual. Otro tema fue con la comida porque por un tiempo dejó de comer bien, especialmente cuando eran sus papás los que le daban la comida... Y claro, con los problemas de peso y acidosis de la Violeta, la angustia... Definitivamente sí que saben cómo dar en el punto débil. Afortunadamente, este tema también ha ido mejorando y podríamos decir que ya se volvió a la rutina familiar, ahora con nuevo miembro a bordo...




Tomás por su parte, se adaptó rápidamente. El entendió que sólo se trataba de dejarse querer. En un buen niño, pero como dicen las abuelas, como buen varoncito, es muy consentido y "mamón" (en el sentido chileno de que le gusta estar todo el tiempo con su mamá). Ya está bastante grande, mide un poco más de 67 cm (dato del último control hace casi un mes), y pesa 7 kg. Estamos expectantes porque en su última cita con el pediatra su peso empezó a rezagarse como el de su hermana, así que si en el próximo control, esta tendencia continúa, habrá que hacerle pruebas para verificar si tiene acidosis también. Esperemos que no sea así. Por ahora lo que sí claramente tiene es reflujo y estreñimiento, con lo que la introducción de las comidas que empezamos hace un mes, no ha sido fácil, pero ahí vamos, probando probando qué le cae mejor, por ahora ha logrado comer pepino, apio, berenjena, pitahaya y granadilla. Con el calabacín y con la manzana no nos fue muy bien que digamos.

El Tomatico como le decimos a veces de cariño, ya duerme siete horas seguidas en la noche, se despierta a comer, y sigue profundo otras cinco horitas más. Claro, cuando su pancita no lo molesta, porque esos días las noches pueden ser terribles. En el día es poco dormilón a menos que esté en casa de su abuela, que no sabemos que es lo que tiene, pero lo invita provocadoramente a largas siestas diurnas.




Otros progresos del pequeño en estos cinco meses y medio son sentarse, manejar muy bien las manos agarrando cosas y cambiándolas de mano. Adquirió rápidamente fuerza en el cuello para sostenerlo y moverlo, también patalea como loco e intenta arrastrarse cuando está boca abajo. Para lo que sí está un poco flojón es para darse la vuelta. Ah! sonrió desde el primer día y hace ruidos constantemente.

Violeta por su parte maneja cada vez mejor el lenguaje y sus relaciones sociales. Hace rápidamente amigos en todo lugar aunque al principio es chica difícil. Le encanta el parque (a qué niño no?) y se trepa a todo lo que encuentra. Le encanta bailar, cantar, leer, ver películas (especialmente si son de Toy Story y en 3D) y pintar. Por supuesto jugar, especialmente si es con su primo Santi que dice que es su mejor amigo.

Ah, el baño ya es prueba superada, ya no usa pañales nunca y hace meses que no tiene accidentes diurnos y un par de semanas que ya no tiene incidentes nocturnos. De hecho ya va sola al baño sin necesidad de recordarle. En realidad, es una niña cada vez más autónoma y muy buena onda.




Por ahora estamos logrando el sueño de cualquier papá, que nuestros hijos crezcan sanitos y felices, y eso, aunque estemos cansados casi todos los días, aunque todavía no podamos tener mucha vida adulta, y nos quede poco tiempo para hacer otras cosas, nos hace muy felices a nosotros también...

sábado, 24 de abril de 2010

Llego TOMAS!!!!

Y ya esta con nosotros "el" Tomás. Se vino el 21 de abril. Todo fue muy rápido y muy sano. Empezamos con las contracciones (en realidad Claudia es la de las contracciones) a eso de las 6:30 de la tarde y en exactas dos horas el Tomás ya estaba con nosotros. Lamentablemente para mi, la moral de siglo XIX de las monjas de la clínica Palermo y alguna que otra razón de orden machista, no me permitió acompañar a Claudia y al Tomás esas primeras horas. Recién lo pude ver a las 11:00 de la noche. El mocoso en sí pesó 3.400 gramos y midió 51cm. y tiene sangre rh Positivo.

Todo salió tan bien que al otro día ya estabamos en la casa con guagua nueva.


Lo divertido fue ver la emoción y felicidad de la Violeta. Ella estaba tan contenta de conocer a su hermano Tomás que no para de saltar y de decir -Qué bueno!!! llegó Tomás!!-. De hecho lo quizo alzar al Tomás apenas lo vió y no ha parado de darle besitos. Ademas que el Tomás le trajo un "Doki", con lo cual todo ha sido alegria. Esperemos que esto dure, aunque sabemos que en algún momento los celos aparecerán.


Lo único malo fue que el "chinito" Tomás nos salió más estreñido que el Papá y la Violeta juntos. Se demoró cerca de 48 horas en evacuar el meconio (primera defecación que acumula todo lo que la guagua consumió en la panza) lo que nos significó una ida a urgencias en la clínica. Por suerte todo no es más que un estreñimiento severo el cual tenemos que observar ante otro síntoma (vómitos, abdomen distendido y otros).


Las primeras impresiones es que el Tomás se parece bastante a la Violeta; de hecho tienen un perfil muy parecido. Lo bueno es que el Tomás por ahora es más tranquilo que una foto y algo flojo para chupar.

Esperemos que esta semana podamos postear nuevamente para que conozcan más buenas nuevas.




martes, 16 de febrero de 2010

De baño, noches en vela y otros quehaceres de la vida cotidiana

Aprendiendo a ir al baño

Después de cinco semanas más o menos, ya tenemos casi controlado al 100% el arte de hacer chichí en el día. Ya no tenemos ningún accidente húmedo durante el día, e incluso en un par de ocasiones avisa solita la Violeta. Y eso que al comienzo fue un poco dramático el asunto pues pasaba el día aguantando con una angustia terrible y llorando, para soltar el chorro cuando le podían el pañal o el "pull up". Sin embargo un día con gran paciencia se dio cuenta de lo divertido que resultaba que hiciera chichí en el poty, y todo cambió y desde entonces usa calzones de tela. Ahora el problema a veces es hacer que salga del baño...

Con la caca y el chichi en las noches es otro cuento. Es el nuevo proceso en el que estamos de momento, pero con su estreñimiento crónico no es tan fácil... Es cuestión de paciencia y mucha lavandería...

Saltando con el Tomás
Uno de los pasatiempos favoritos de la Viole es saltar, y desde ya le está enseñando a su hermano que ya llega a su semana 31 en la pancita... Sólo le quedan nueve semanitas para llegar al mundo, y Violeta ya lo espera con ansia dándole besos y abrazos todos los días, cantándole (ya se sabe La Vaca Lola, El Barco Chiquitico, Los pollitos dicen, y muchas otras más).

Pese a la resistencia y continuos regaños de su mamá para que no salte en la cama, su papá le ha patrocinado la diversión como verán en el video...




En la recta final
En estas últimas semanas Tomás se está haciendo sentir de forma innegable. No deja de patear a su mamá y dormir es historia del pasado. Cuesta conciliar el sueño que no llega antes de las 11.30 y a más tardar a las 4.30 está dando su alerta. Esperemos que cuando nazca la cosa cambie rápidamente...

La Violeta por su lado está entusiasmada porque su hermanito le traerá un DOKI (la mascota latina de Discovery Kids, que le encanta a la Viole). O al menos eso le dijeron sus papás, aunque lo hicieron antes de darse cuenta de que estaba agotado. No se preocupen... por suerte el fin de semana Tomás logró conseguirlo y lo compró inmediatamente...

Para nuestras dos flores

Esta canción ha sido desde hace un tiempo de "la niña Violeta"... pero en realidad es para nuestros dos pequeños, pues son los que nos hacen olvidar cualquier pena que tengamos...


domingo, 3 de enero de 2010

La saga continúa...

DICIEMBRE CON AMIGOS


La noche de las velitas estuvo bastante divertida. Violeta estuvo con muchos niños, vio las lucecitas navideñas que le encantaron, prendió velitas y hasta paseo en triciclo con el vecinito. Creo que empieza a entender la magia de la Navidad y por supuesto el 24 se durmió como a las dos, y desde ese día no ha dejado de jugar con sus regalos: el coche, el osito nené, la pizarra de elefante, el autito, y el pianito... con todo eso, aprendió a destapar regalos...

MINIVACACIONES EN CHILE
Después de la noche de las velitas, Violeta se fue con su papá a su otra tierra y estuvo un par de semanitas allí. La paso muy bien en la parcela y la piscina, palabras que incorporó a su ya nutrido vocabulario, se aprendió el nombre de todos sus primos y tíos, y pese al verano y al calor de Santiago, conoció la nieve más al sur, en Villarrica. La pasó muy bien y ahora sabe que tiene abuelos en Colombia y abuelos en Chile, como dice ahora "tata Chile".


MIS PRIMEROS DOS AÑOS

Después de la noche de Navidad, vino su cumpleaños. No tuvo fiesta porque sus papás decidieron aplazarla hasta enero cuando sus amigos no estén tan ocupados con las fiestas navideñas y de fin de año. En todo caso sí le partieron una torta y le dieron un par de regalitos: una carpa de elefante y una alcancía que le dio su abuelo...


LA SAGA CONTINÚA... AHORA LLEGA TOMÁS
"Musiquita a nené" dice la Violeta mientras le pone un ipod al nuevo miembro de la familia. Se trata de Tomás que ya tiene 24 semanas en la panza de la mamá, y viene a renovar Cronicas de Pancita y el color de la casa. Ello explica un poco nuestra ausencia de los últimos meses porque el primer trimestre fue bastante más sintomático que en el primer embarazo...

Ahora que ya han pasado los incómodos malestares iniciales y que la panza está enorme (no me explico cómo puede tener otros cuatro meses para crecer), todos estamos muy felices, incluso Violeta que se vio favorecida con una remodelación de su cuarto y que le da besitos a la "guata" de su mamá y dice "aquí está nené" o "ahí está Más (Tomás)"...

Ya tenemos todo practicamente listo, porque gracias a que Violeta es reciente y a que la madres es la menor de tres hermanas con buena diferencia, pero no tanta para que se hayan deshecho de lo que tenían para sus pequeños, el equipo está armado, en realidad sólo queda comprarle la primera muda, un cubrelecho para él, cambiarle la decoración al moisés porque es muy de niña, y adquirir una toalla grande extra...


Cuarto de los niños remodelado (autor: colectivo)


Silla de los niños (autor: la mamá)